Hoy día el hombre cuenta con infinitos
tratamientos de belleza, los cuales ya no son patrimonio exclusivo de la mujer
y no está mal visto que un hombre los utilice. Es más, se han convertido en
símbolo de buena imagen y característicos del hombre moderno, al día, bien
cuidado y actual.
Algunos de estos tratamientos se caracterizan por
su forma e aplicación, tal es el caso de los tratamientos en base a envolturas corporales, con el fin de
rejuvenecer el cuerpo. Se aplican lodos o pastas o mezclas hechas de algas marinas,
lodo, hierbas; y se pueden aplicar en distintas zonas del cuerpo para mejorar
el aspecto de la piel e incluso para tonificar los músculos.
Estos tratamientos están a la orden del día en los
spas y en los centros de belleza, ya desde hace algunos años. La técnica se
hizo popular en los años 80 y de nuevo ahora vuelve con ímpetu renovado y
renovador por los ingredientes empleados. Es una vuelta a la esencia de la
naturaleza lejos de la química y de la cirugía.
A las aplicaciones de hierbas, algas y lodo, se
añade también el chocolate, bastante de moda. Se combinan con masajes
relajantes que tonifican, relajan y harás que salgas como nuevo del
establecimiento. Estos tratamientos ya no son privativos de las estrellas del
celuloide, sino que se han popularizado y están al alcance de la mayoría de los
bolsillo, no decimos de todos porque la crisis está siendo bastante cruel con
algunos.
En
este tipo de tratamientos se suele cubrir el cuerpo con una funda térmica para
que el sudor elimine toxinas durante un tiempo medio de unos treinta minutos,
tras los cuales se eliminan los compuestos aplicando agua y crema hidratante.
Se suman pues los efectos en el cuerpo del paciente de hidratación y de
nutrición; dependiendo de los componentes utilizados podrá ser también
reafirmantes, suavizantes, relajantes, adelgazantes…