Es interesante presentar nuestra experiencia y sobre todo es importante la sinceridad, hay que hablar de nuestra experiencia en anteriores proyectos con naturalidad. No hay que dejar que los nervios coman terreno en la entrevista puesto que cuanto más terreno tengan ellos menos tendremos nosotros. Hay que defenderse de uno mismo. Tenemos que salir airosos de esta conversación, quizás sería mejor plantearnos la entrevista como una conversación para el conocimiento mutuo y no como una entrevista de la que nuestro trabajo depende, aunque así sea. Hay que saber hablar de la propia experiencia profesional, no es que sea difícil, pero nos jugamos el puesto en ello. Podemos empezar con una breve descripción de nuestros puestos anteriores. Se trata de destacar logros profesionales para que el entrevistador quede encantdo. Podría decirse que más que los nervios lo que puede hacer fallar al candidato es la falta de preparación de la entrevista. No podemos dudar en las fechas de nuestro propio