Hay quien toma partido por los jóvenes en detrimento de los mayores y afirma que "dar trabajo a los sénior sea quitárselo a los jóvenes". Esto es falso. Si acaso sería al contrario, los mayores ya estaban aquí antes de que vinieran los jóvenes, dar trabajo a los jóvenes sería quitárselo a los mayores. Eso suena con un poco más de lógica. Pero no se trata de ver las cosas así, desde esa óptica maniqueísta, o jóvenes o mayores. Todos están en el mercado laboral y hay que tener en cuenta las necesidades de todos. Pero los mayores tienen un valor añadido que es desdeñado, despreciado, obviado, muy injustamente. La experiencia es un grado y tanto que sí. Un mayor es un valor muy activo en una empresa. Un valor rinde con una calidad que se traduce en rentabilidad de tiempo y de espacio que una persona que está empezando en la profesión no puede tener porque no ha vivido, no ha experimentado lo suficiente. El joven ha de aprender del mayor y a la vez el joven da vida al mayor