El estudio del fototipo es fundamental si se decide realizar la fotodepilación, para poder determinar que tan oscuro es el color de la piel debido a que no se recomienda en pieles muy oscuras o con vello de color muy claro. La clasificación de los fototipos se hace a través de la clasificación Fitzpatrick de tipos de piel que se divide de la siguiente forma:
Tipo I Siempre se quema, nunca se broncea.
Tipo II Siempre se quema, algunas veces se broncea.
Tipo III Se quema algunas veces, siempre se broncea.
Tipo IV Nunca se quema, siempre se broncea.
Tipo V Moderadamente pigmentada.
Tipo VI Piel negra.
Dentro de la explicación sobre qué es la fotodepilación hay que entender que la aplicación de la luz pulsada busca retrasar en la capacidad de crecimiento de los folículos pilosos. Es factible que se requieran de 4 a 8 sesiones para lograr los resultados, la duración de estas sesiones varía dependiendo de variables como el color de pelo, color de piel, calibre de pelo, profundidad de pelo, localización anatómica, sexo y el momento hormonal. Es importante consultar al médico dermatólogo quien será el único que podrá determinar el número y la duración de cada sesión y adicionalmente si la persona es apta para someterse a este tipo de depilación.
Algunas de las ventajas de la fotodepilación con luz pulsada o IPL son:
- La posibilidad de tratar zonas más grandes del cuerpo al mismo tiempo.
- Se puede usar en todas las áreas del cuerpo.
- Se puede realizar en cualquier color de piel y de vello.
- El riesgo de cambios en la pigmentación es reducido.
- Es indolora
- No es un procedimiento invasivo
La fotodepilación no se recomienda en:
- Pacientes hipersensibles a la luz
- Paciente que estén consumiendo medicamentos fotosensibilizantes
- En pacientes que se han bronceado 3 a 4 semanas antes de la sesión.