El láser que se usa para depilación láser en hombres, al igual que en las mujeres, consiste en una luz de un solo color que se desplaza en una sola dirección. Esta luz se absorbe con mayor precisión en el folículo piloso incrementando así su efectividad. Existen tres tipos de láser: el diodo, el rubí y el alejandrita.
La depilación láser no se recomienda en hombres que presentan alguna de las siguientes patologías:
- Acné severo
- Psoriasis activa
- Herpes simple activo
- Infecciones
- Fiebre
- Diabetes
- Epilepsia.
Las zonas que más demanda tienen para ser depiladas con láser en los hombres son:
- la barba
- la espalda
- los hombros
- el tórax
- el abdomen
- el entrecejo
- las orejas
- las manos
- los pómulos
- las piernas
- los brazos
- los glúteos
- zona íntima
El grosor del vello en los hombres es mayor al de las mujeres, razón por la cual pueden requerir más sesiones para obtener los resultados esperados, en la mayoría de los casos se usan láseres son aquellos de longitud de onda más larga debido a que logran penetrar más en el folículo. Es importante encontrar un centro o clínica estética que ofrezca instalaciones apropiadas, equipos de alta tecnología y profesionales cualificados y que cuenten con experiencia en depilación masculina.
Algunas recomendaciones que pueden hacer que los resultados de la depilación láser sean más efectivos entre los pacientes masculinos son:
- Evitar la exposición al sol un mes antes y un mes después del procedimiento.
- Usar cremas solares protectoras.
- Hidratar la piel de manera habitual.
- No afeitar la zona a tratar ya que el vello debe tener mínimo 3 mm de largo.
- No aplicar lociones que contengan alcohol y puedan causar irritación en la piel.