Cayetana Álvarez de Toledo Gobierno entiende, como la mayoría de los que tienen cabeza sobre los hombros, que ha llegado el momento de protestar a lo grande contra el sanchista socialcomunista que está hundiendo España, humillando a los españoles, traicionándolos y jugando con ellos y sus bolsillos.
Piensa que ha llegado el momento de que los españoles salgamos a la calle a protestar y “decirle a Pedro Sánchez qué pensamos de él”. Así lo ha dejado claro en un ‘tweet’ que hace saltar las alarmas de Moncloa.
Es indignante y contra natura que el Gobierno de Pedro Sánchez respalde los indultos de los golpistas del 1-O, frente a que han sido desaconsejados por la Fiscalía y por el Tribunal Supremo de Justicia. Parece que estas instituciones las tiene Sánchez para entrenarse a la piola con ellas.
Son muchas ya las voces críticas contra el sanchismo socialcomunista que se ve obligado a complacer a sus socios catalanes. los mismos que lo sustentan en el poder. Pero un presidente no negocia su puesto, no vende a España, no traiciona a los españoles, luego el pueblo, si esto sucede, está totalmente legitimado para deponer al gobernante. Por ahora la ‘popular’ lo que ha hecho ha sido animar a los españoles a tomar “con urgencia” la calle en protesta contra el Gobierno de Pedro Sánchez.
“Los españoles debemos decirle a Pedro Sánchez lo que pensamos de él y sus indultos manifestándonos con urgencia en la calle”.
Y todo esto después de que Sánchez dijese que tomaría la decisión sobre los golpistas catalanes en base a
- los “valores constitucionales de la concordia,
- el diálogo,
- y por la superación de la crisis que desgarró la sociedad catalana”
- y no por “venganza” ni “revancha”.
De nuevo el buenismo se hace estupidez y traición a España. Esto es lo que no tuvo reparo en decir en Bruselas Sánchez tras el Consejo Europeo.
Dice que:
“Lo más importante para mí es que pese a que hay partidos, personas que defienden otras tesis, creo que en los valores constitucionales no se encuentra ni la revancha ni la venganza, y sí la concordia, el entendimiento, el diálogo, el respeto a las leyes, la Constitución y la legalidad, donde siempre se ha movido el Gobierno de España”.
Ya en el debate en RTVE previo a las elecciones en Cataluña el PSOE del pasado abril de 2019, demostró su afán de indultar a los golpistas. Cayetaba retaba a María Jesús Montero con estas palabras: "Repita y diga conmigo: el PSOE no volverá a indultar golpistas", contestando la Montero que no caería en sus “provocaciones”. Este silencio vendría a demostrar que el Gobierno de Sánchez ha pensado largo y tendido en cómo sacar a sus socios catalanes de Gobierno de prisión.
El gobierno se comporta como alguien que hace una trastada y va preparando el camino porque sabe que, tarde o temprano, se va a descubrir el pastel. Está trabajando la indignación del pueblo español que ya está más que harto, ahora la indignación, como siempre, está más que justificada por los posibles indultos parciales por parte del sanchismo a los líderes separatistas catalanes.
Sánchez va lanzando dardos con los que pretende, -a la fuerza ahorcan-, que los españoles se vayan conformando, vayan asimilando su decisión de liberar a
- Oriol Junqueras,
- Jordi Sánchez
- y demás presos del independentismo.
Está convirtiendo la, hipotética, concesión de los indultos a los separatistas, en un fraude de ley.
Perdonar por motivos políticos la sedición de un delincuente no arrepentido que, además, promete volver a reincidir y reincidir hasta conseguir el objetivo secesionista, no es más que
- legitimar y
- convertir estos delitos en meras actividades políticas,
- y esto es una perversión sanchista.
Sánchez pretende amordazar y poner una venda en los ojos a los españoles, preparando el camino para claudicar ante unos golpistas victimistas, como si su política para apaciguarles fuese a terminar disolviendo el chantaje catalanista.
Objetivo: contentar a ERC para atar bien atada la continuidad de la legislatura. Juegos políticos que traicionan a la Constitución, a España y a los españoles.
La sociedad española y su Gobierno no tienen que ser generosos con quienes se jactan de su reincidencia y delinquir.
Se ningunean aquí muchas cosas:
- el valor de la ley común
- la voluntad de la soberanía nacional
- estos individuos están pisoteando la seguridad jurídica
- La soberanía nacional es de todos los españoles, los catalanes están integrados en ella, no van en un paquete aparte
- conciliar la legalidad con la ‘amnistía’ y la ‘autodeterminación’ no es posible
La única solución sanchista es someter la democracia a las imposiciones de los golpistas secesionistas, algo que es tan peligroso como inasumible.
No es propio que un Gobierno conceda indultos en contra del criterio de
- la Fiscalía y
- del Tribunal sentenciador.
El Supremo aún no se ha pronunciado.
No es tarea de los jueces
- justificar amnistías encubiertas
- ni amparar la arbitrariedad del Gobiero.
Hay que tener en cuenta que si un indulto no está convenientemente motivado, puede ser recurrido y revocado por los Tribunales.
El Ejecutivo no se puede comportar como un pirata con patente de corso. No puede. Por más que:
- las medidas de gracia sean competencia exclusiva del Gobierno
- o que el criterio de los jueces no sea vinculante.
Estamos ante una doble cuestión:
- Una cosa es indultar con razones
- y otra abusar de la ley pretendiendo réditos políticos.
No cabe posibilidad de diálogo o negociación ante las figuras ilegales de
- la amnistía y
- la autodeterminación.
Los que serían amnistiados no aseguran que una vez excarcelados respeten la legalidad que los llevó a la cárcel. No existe compromiso expreso alguno de que estos individuos no promoverán la independencia una vez que sus penas queden amnistiadas, es decir, que la acción judicial haya quedado en papel mojado.
El peligro persiste y el catalanismo independentista sigue trabajando en sus objetivos secesionistas. Por tanto ¿por qué el indulto, si no está legitimado en este caso en absoluto?.
España entera no se puede someter a la exige humillante que supone la renuncia de España integridad, a seguir siendo una nación con todas sus regiones unidas.
El indulto supone:
- que el Gobierno estar como pidiendo perdón a los golpistas
- sería como aceptar que los jueces son culpables de dictar un fallo injusto y represivo.