Según el Gobierno no se podía saber o predecir lo que iba a pasar, pero sí se podía saber, los datos estaban ahí, por una parte los informes de la OMS sobre lo que acontecía en paises como China, Corea, Japón, Tailandia; después en Italia, igualmente la información procedente del Centro de Prevención de Enfermedades de la Unión Europea.
Pero el problema desbordaba al Gobierno y las hojas no le dejaban ver el bosque, habría sido necesario abstraerse y tratar de alejarse de cualquier tipo de consideración política o ideológica para que salieran a la luz preguntas y respuestas.
Según los porcentajes que nacen de las estadísticas la ratio de España es diez veces más fallecidos por millón de habitantes que la India. Pero nosotros somos superiores en sanidad, sin emabrgo los resultados son hasta peores. ¿Por qué?. Mercado ha intitulado un libro como Una pandemia de errores (Deusto), nace de indagar, investigar, cotejar las diversas fuentes tanto española como internacional que ofrecía la Administración. Su autor habla de una "crónica de las mentiras, manipulaciones, imprudencias y negligencias que dejan más de 44.000 muertos y un país dividido". "En ciertas fases de la epidemia, el Gobierno ha sido casi negacionista", dice.
Avanzando Febrero, se tenía ya por evidente que el virus había atravesado las fronteras y el bloqueo de la propia China, se había expandido ya a distintos continentes, aunque ya había habido casos en 2019, sobre todo a partir de Diciembre.
Pero a pesar de las evidencias las autoridades en España seguían dudando de que se diese contagio entre personas.
Esta falta de conocimiento, de actuaciones, de toma de conciencia y de concienciación no se explica. Dice Mercado: "Es una falta de conocimiento que no se explica a esas alturas". Mientras en Asia ya se controlaban la temperatura de los viajeros en los aeropuertos. "España no empezó a hacerlo hasta varios meses después".
"Desde enero, todas las medidas y advertencias que fue promulgando la OMS fueron ignoradas por el Gobierno". ¿Por qué?. "No se realizó un cribado exhaustivo de los viajeros procedentes de lugares de riesgo, no se utilizaron termómetros en la frontera, no se estableció un plan de rastreo de contactos ni de confinamiento obligado para los posibles positivos que pudiesen ir surgiendo". ¿Por qué?.
Según Fernando Simón,
España sólo iba a sufrir "un caso o dos", y eso que ejercía y a día de hoy ejerce como director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias
del Ministerio de Sanidad,
según él no había nada por lo que alarmarse. Nadie previó la inmensa cantidad de fallecidos, la deplorable asistencia, un sin fin de fallos imperdonables.
Mientras la ciudadanía enfermaba y moría el Gobierno enfermaba de parálisis y de falta de previsión y organización, no supo dar una rápida respuesta ante una crisis sanitaria, que por otra parte era previsible por las informaciones y a la vista de los acontecimientos, fuera y dentro del País.
Incluso "y pese a todo, a finales de febrero, aún con el Gobierno habiéndose tomado un mes de ‘vacaciones’, España sólo registraba una treintena de casos. Había tiempo de hacer las cosas bien. Había tiempo de iniciar un rastreo eficaz. Lo que se hizo, sin embargo, fue limitarse a decirle a los enfermos leves que se quedasen en sus casas".
Según Mercado, "en el Gobierno han pecado de doble lenguaje. El 20 de febrero, cuando decían con optimismo que como mucho habría un par de casos y que España estaba salvaguardada por un sistema sanitario que entonces calificaban de robusto, se estaba elaborando al mismo tiempo un manual para el manejo de cadáveres del coronavirus"... "Pese a que existían una serie de protocolos supuestamente fiables, esos mismos protocolos reconocían que faltaba material sanitario; aún sosteniendo que el impacto no iba a notarse demasiado, se comenzó a hablar de posibles colapsos hospitalarios y se puso sobre la mesa la necesidad de los triajes. Pero ni siquiera entonces se vio necesaria la compra de material".
Países como Alemania se anticiparon con mucha diferencia a las primeras actuaciones españolas. Dice Mercado: "Alemania inició las suyas a principios de enero. España las retrasó hasta el 20 de marzo, en un momento en el que el mercado ya estaba colapsado y lleno de mafiosos que vendían desechos a un precio tres veces superior".
El España el mensaje que se vendía era optimista.
"No importa que fuese para salvar la economía o para no tener que cancelar manifestaciones. Fue un problema de irresponsabilidad. Manejaron mal la información que sí tenían".
"A finales de febrero, el 80% de los positivos en España eran importados. No se llevaron a cabo rastreos exhautivos ni confinamientos prudenciales para los pacientes con síntomas leves. Tampoco se cerró la conexión aérea con una Italia confinada, ni se les tomó la temperatura a los pasajeros de esos vuelos".
Pero en Enero ya morían personas, quizás en Diciembre también, en Noviembre, en Octubre de 2019.
También se denuncia en el libro de Mercado, refiriendose al Gobierno, la manera de informar sobre la crisis:
"Han tratado a la prensa de una manera que no es digna de un país democrático".
- Seleccionaron las preguntas, primero;
- no aceptaron repreguntas, después;
- y mantuvieron con los periodistas una relación como si todo se tratade de una conferencia irrelevante más que ruedas de prensa destinadas a garantizar el derecho a la información de los ciudadanos en la mayor crisis que podemos recordar.
De las estadísticas de Abril, desaparecieron, de pronto, mágicamente, miles de positivos que fueron detectados por medio de test rápidos.
El Gobierno había cambiado sus criterios, pese a que eran los que funcionaban en los demás países. Según Mercado: "Lo hicieron de una forma tan burda que la OMS se mosqueó y dejó de tratar los datos españoles por falta de confianza". Es gravísimo que la Organización Mundial de la Salud, evite tratar con datos españoles porque no le infunden en absoluto confianza. Así nos va...
El número real de infectados sigue sin estar claro, la transparencia parece que está de vacaciones.
Si el número real de infectados que se facilita no es real, toda estadística que se realice teniendo en cuenta este referente, necesariamente estará sustancialmente contaminada.
"¿Por qué España tiene una tasa de mortalidad tan exagerada? Se trata de un dato poco fiable porque no sabemos exactamente cuántos contagiados tenemos".
Ni siquiera es exacto el número de fallecidos. "En mayo se decía que había 28.000, pero el MoMo señalaba un incremento con respecto al año anterior de 44.000...
Informes MoMo 2020 - Instituto de Salud Carlos III
...¿Cómo es posible un desajuste de 16.000 muertes?. Se utilizó la excusa de causas ajenas al coronavirus, o de las patologías previas. ¿Pero qué anciano no tiene patologías previas? De 44.000 muertos, la mayoría pertenecían a la tercera edad...
No solo morían ancianos con patologías previas, también morían personas independientemente del grupo de edad sin patologías previas y sufrían gravemente la enfermedad, aunque sin óbito gran parte de la población sana.
...¿Por qué el Gobierno no dio los datos de fallecidos en residencias, pese a que los poseía? ¿Dónde estaba la transparencia? No hemos tenido información real porque admitir las cifras reales habría sido reconocer el fracaso de la gestión de un Gobierno que decía que el virus no iba a llegar".
En algunas residencias en Diciembre de 2019 que esta redacción tenga conocimiento, ya se padecía la pandemia en residentes, mientras en la residencia ni siquiera sabían qué padecimiento tenían, de pronto habían contraido neumonía y morían como moscas, sin saber por qué.
Mercado en su libro también toca el tema de las manifestaciones del 8-M y analiza el informe de la Guardia Civil que investigó este tema. Mercado rechaza muchos de los argumentos utilizados entonces para desacreditarlo. Dice:
"Hay una cosa curiosa. De pronto, a partir del 8 de marzo, comienzan a desconvocarse manifestaciones. La cosa es que, como no podían prohibirse, la Delegación de Gobierno encontró una solución intermedia. Se dedicó a llamar a los distintos organizadores para hacerles saber que la situación era delicada. Naturalmente, si la Delegación de Gobierno te llama en esos términos tú desconvocas tu manifestación. Así hicieron todos. Lo curioso es que de esas llamadas no dejaron constancia escrita, ni emplearon ninguna fórmula legal para hacerlo. No se tiene constancia, por tanto, de que lo hiciesen con los organizadores de las manifestaciones feministas".
Pero..., continúa interrogándose: ¿Si pudieron hacerlo desde el 9 de marzo, por qué no lo
hicieron con las del 8?... "Ahí te salen con la respuesta peregrina de que
esas ya habían sido autorizadas por el anterior delegado. Lo que no se
entiende es que la Delegación actual no pusiese pegas a que los partidos
del Gobierno promoviesen las manifestaciones feministas, cuando el
delegado que trató de evitar actos posteriores, José Manuel Franco, pertenece al PSOE", asevera Mercado.
Se desaconsejaron "de manera furibunda" encuentros de la Iglesia Evangélica. "Se les hizo saber que que Sanidad desaconseje la realización de un acto es tanto como un imperativo para su cancelación".
Una nota de la directora de Salud Pública, Pilar Aparicio, decía: "todo evento multitudinario de cualquier tipo con alta presencia de personas de las zonas del mundo en las que hay transmisión" era "considerado de riesgo".
Tanto desde el Gobierno como de otros diversos medios se criticaba que la Guardia Civil utilizase esa nota en la investigación sobre las manifestaciones del 8-M porque al parecer no recogió la parte de la frase que incidía en que hubiese "personas de países con transmisión" para que las manifestaciones fuesen consideradas de riesgo. Los asistentes a las manifestaciones feministas eran nacionales en su inmensa mayoría.
Mercado al respecto observa una paradoja en todo el asunto:
"En ese momento España ya tenía transmisión local. El truco era hacer creer que el riesgo venía de concentraciones con gente venida de China, o Corea, pero es que ese fin de semana en España ya había 489 positivos y 17 muertos".
Eso si atendemos a los datos que se facilitaron oficialmente, pero en realidad hubo muchos casos que ni siquiera se contabilizaron, desconocidos, mal diagnosticados por el desconocimiento. Los mismos sanitarios decían, esta persona ha muerto pero, en realidad, no sabemos de qué (citando un caso conocido, infección en Diciembre y muerte en Enero).
Podría ser que el Gobierno en realidad no tomase conciencia de lo que se nos podía venir encima porque parafraseando a Mercado: "ni Sanidad se puso en contacto con Delegación de Gobierno en ningún momento ni Delegación preguntó a Sanidad si era pertinente seguir adelante con los preparativos. Son cosas que han llamado la atención al juez, pero no es delito no preguntar. Sí que lo sería que constara por escrito que Sanidad desaconsejó su celebración y no se la hizo caso".
Un informe del Centro Nacional de Criminología recogió la evolución de la ratio de contagios.
- En febrero estaba bajando.
- "A principios de marzo se estimaba que cada enfermo contagiaba a una media de dos personas.
- El 10 de marzo estábamos en un ratio de 4,5 otra vez".
- ..."una semana después, los casos habían subido un 1.200%".
- En aquel fin de semana, a las manifestaciones feministas hay que sumar un partido del Atlético de Madrid y un mitin de Vox, entre otras cosas.
"La primera cuestión que hay que tener en cuenta para entender lo que ha sucedido en las residencias es que el Gobierno tuvo mucho interés desde el principio en no coger esas competencias",
explica Mercado. La competencia de las residencias estaba en manos de Pablo Iglesias, vicepresidente segundo del Gobierno.
Se hicieron recaer desde bien pronto las responsabilidades sobre las autonomías, pero el Gobierno central, no autonómico, tenía obligación de velar por el buen funcionamiento de estos centros sociosanitarios. Cualquier anomalía debía ser informada, según estaba decretado, a la Delegación de Gobierno, "pero no consta que hayan existido demasiadas inspecciones en ninguna Comunidad Autónoma".
- "¿Tenían las autonomías capacidad para llevar a cabo esas inspecciones, o estaban saturadas con la mera respuesta sanitaria?".
- "Se estipulaba que los enfermos de coronavirus debían permanecer en habitaciones bien ventiladas, pero se abría la opción a que lo hiciesen en habitaciones compartidas por la falta de espacio. ¿De verdad creían que no iba a haber contagios de esa manera?", luego los propios protocolos del Gobierno dejaban desprotegidos a los ancianos.
- "además de no abastecer a las autonomías con material sanitario, Moncloa aconsejó el uso de sustitutivos ineficaces como mascarillas reutilizadas o guantes de cocina".
- "Con esas condiciones, bastaba que un único trabajador llevase el virus de fuera para que el contagio se extendiese entre los residentes sin capacidad de reacción".
- En cuanto a triajes. "A Madrid la han acusado de exterminar a los ancianos, pero resulta que el primero en dictaminar los triajes fue el propio Gobierno".
- "esos mismos protocolos utilizados en Madrid fueron iguales en todas las comunidades autónomas".
- Según Mercado, el problema fue que Moncloa no quiso nunca saber sobre el verdadero estado de las residencias mediante inspecciones
- tampoco se llevaron a cabo medidas para revertir el colapso. En palabras de Mercado: "Evidentemente, las competencias eran de las autonomías, pero el Gobierno seguía siendo el máximo responsable y no se preocupó en ningún momento por la evolución de esos centros en ninguna comunidad. Buena parte del fracaso de las residencias, de hecho, se debió a la falta de material homologado, algo que sólo es achacable a la falta de previsión inicial del Ejecutivo".
Mercado compara las medidas españolas con las de otros países como Alemania que ofreció
- una "reacción mucho más rápida e inteligente".
- "En abril destinó 20.000 soldados a hacer de rastreadores. España sólo a 2.000, a partir de octubre. También ha hecho muchos más test".
- "A Grecia, país más pobre que nosotros, le han sobrado camas UCI.
- Desde el primer momento organizaron confinamientos
- y cerraron los aeropuertos al turismo extranjero;
- se prohibieron actos masivos;
- se decretaron cuarentenas obligatorias para todos los griegos que llegasen de sitios sospechosos;
- y un largo etcétera".
Por contra:
- España, todavía tiene datos poco fiables,
- en número de contagios y de muertes sigue entre los primeros países del mundo.
"A lo mejor lo que nos diferencia de otros países mucho menos desarrollados de todo el globo es que ellos han hecho cosas de forma un poco más sensata que nosotros. A lo mejor simplemente el uso de mascarillas desde el comienzo ha marcado una diferencia significativa en cifras. No se puede saber con exactitud. Lo que se sabe es que al principio aquí hasta se desaconsejaba el uso de la mascarilla, cuando la OMS siempre las recomendó". Esta afirmación ha sido cuestionada por diferentes medios de comunicación, Mercado no se retracta, ni debe, porque es cierto y en el archivo de TVE estará, debe estar Fernando Simón desaconsejando el uso de mascarilla porque no le parecía algo ni necesario ni efectivo.
"La OMS no puso pegas nunca. Dijo que no eran suficientes o imprescindibles, pero sí recomendables. Desde enero machacaron con eso. Antes ya las recomendaba para la gripe, ¿cómo no las iba a recomendar también para el coronavirus?".
En la segunda oleada igualmente España uno de los países
que peor ha gestionado la crisis.
- "Y lo primero que se ha dejado de hacer entre la primera y la segunda ola es cumplir las normas de la UE para desconfinar"
- "La UE exigía que España tuviera el sistema sanitario recuperado antes del desconfinamiento total. Porque iban a venir dos olas y se sabía".
- "¿...qué ha hecho España en ese lapso? ¿Ha creado decenas de miles de UCIS para hacer frente a posibles rebrotes? ¿Ha contratado muchos más médicos, no solamente en Madrid, sino en cualquier autonomía? No".
- "El que gobernaba la gestión de la pandemia a nivel nacional, incluso antes del mando único, era Illa. El Ministerio de Sanidad estipulaba las pautas que debían seguirse".
- "... el Gobierno central no ha sabido restablecer completamente el sistema sanitario con inyecciones económicas poderosas".
- ..."también ha faltado una buena gestión autonómica posterior. Tampoco se han hecho rastreos de contactos de nuevos positivos a ningún nivel. Eso ha provocado que se quede bajo la alfombra una tasa de infección brutal. Pero lo llamativo es que todo lo que no se hizo durante meses, antes incluso del estado de alarma, es lo que el Gobierno de Sánchez le exige a algunas autonomías de repente".
"Al principio, cuando alguien osaba criticar la gestión o buscar comparaciones con otros países, se le acusaba de antipatriota y se decía que lo que tocaba era remar unidos. Ahora, sin embargo, parece que esa regla ya no vale y que se pueden señalar culpables con nombre y apellidos y comparar comunidades autónomas".
"La cosa sería distinta si Moncloa se hubiera volcado con todas ellas. Si les hubiera proporcionado todo lo indispensable para que hicieran frente al virus. Entonces sí que después tendría derecho a discernir quién lo ha hecho mejor y quién lo ha hecho peor. Ahora, sin embargo, acusa a las autonomías de falsear datos, cuando ellos llevan haciéndolo desde abril como mínimo. No tiene ningún sentido".