Al parecer la policía acusa a Iglesias de entorpecer la investigación que pretende esclarecer quién es el autor las cartas amenazantes con balas.
Para difundir la supuesta amenaza Pablo Iglesias anduvo ráudo el jueves día 22 de Abril. La amenaza había llegado en un sobre incluyendo cuatro cartuchos de bala del calibre 7,62×51, que es una munición usada como armamento de guerra.
Según publicó Ok diario, ha habido demasiadas prisas, según han entendido agentes de Policía que llevan el caso que creen que pudiera haber alertado al autor, según parece, incitándole a destruir pruebas y también dificultando la investigación.
Por otra parte, al fotografiar las balas, se podría haber roto la cadena de custodia.
Los pasos de Iglesias, moviéndose en redes donde difundió imágenes de las amenazas con mucha rapidez habrían complicado la labor de investigación policial significativamente, según entenderían los agentes encuadrados en la asociación ‘Policía Siglo XXI’.
Las amenazas «deben ser esclarecidas por su gravedad, sin dejar de ser algo normal en todos los países que políticos de ese nivel reciban amenazas porque el mundo está lleno de locos y fanáticos. Lo que no es tan normal es que nada más recibirla, uno de los implicados se vaya a las redes sociales a contarlo con foto incluida, eso, unido al desplante del día después en una emisora de radio, ha hecho pensar a mucha gente que esta amenaza ha podido ser utilizada como estrategia política», recuerdan desde la asociación. Recordemos nosotros los lectores que Iglesias es un político sin tradición política, estas cosas las ha pasado por alto...
Del bombo inicial socialcomunista, en 48 horas, ha pasado la campaña del bloque de izquierdas formado por PSOE, Podemos y Más Madrid, a dar un gran giro. Cuando la policía sigue investigando las supuestas amenazas, ahora los tres del bloque citado han anunciado que no participarán en más debates.
En este vídeo podemos ver un extracto ideológico de lo que abandera este bloque izquierdista:
Al margen de la investigación policial, la opinión popular, que como el refranero, es sabia, ya está pensando en que las supuestas amenazas son falsas y que vienen del bloque izquierdista.
Los socialistas han metido en campaña a Grande-Marlaska y a María Gámez, supuesta directora directora de la Guardia Civil. Como lema de campaña, -que es lo que se lee entre líneas haber motivado el paripé de las amenazas, han adoptado ‘fascismo o democracia’.
Con esto lo que hacen es arrogarse para ellos el concepto de democracia, que por más que quieran adueñarse del mismo, lo que tienen que hacer es demostar que lo son y actuar en consecuencia. Por otra parte dan por sentado que el término mal empleado en España de "fascismo", -que en realidad alude a milicia italiana, nada que ver con Epaña-, es propio de la derecha, sin embargo siendo el "fascismo" un término asociado a lo dictatorial, parece cuadrar mejor al bloque de las izquierdas, según los hechos que diariamente venimos presenciando. La destrucción de pruebas es algo similar, por su actitud, a cuando dieron el tremendo pucherazo que alzó al frente popular al Gobierno de la Segunda República. Raz´´on ésta por la cual, el ciudadano de a pie anda pensando que las cartitas forman parte de su estrategia elctoral.
Dicen desde la policía según publicara Ok diario:
«A la Policía todo esto nos da igual, son discursos políticos y no nos competen. Lo que sí nos compete es asegurar la detención del autor y el primer problema surge por la actitud de Pablo Iglesias al hacerlo público. En este tipo de delitos anónimos, una de las bazas de la policía es la relajación del autor, que ha sido activado en su instinto de defensa».
La reacción del autor material de las cartas con balas podría ser, al ver el caso en los medios de comunicación, «la destrucción de pruebas». «El primer consejo que se da es guardar silencio. Amenazas se reciben muchas, sólo que no todo el mundo hace política en campaña con ellas», afirma la Ppolicía.
El proceder de Iglesias haciendo públicas el jueves las amenazas antes de poner la denuncia ante la Policía, cosa que hiciera el viernes, tras el polémico debate en Cadena Ser-, ha hecho «daño a la investigación».
Concluyen los Policías que asi es imposible localizar al autor. «Queremos creer que antes de dársela a Iglesias, un equipo de Policía Científica llevaría las pruebas a un laboratorio para su análisis e informe pericial. De no ser así, la cosa es aún más grave».
La Policía Científica tiene ya algunos avances en la investigación:
- los sobres fueron depositados en un buzón de Madrid.
- Las balas de las cartas sirven para multtud de rifles de guerra y no solamente el Cetme que usaba el Ejército,
- carecen de numeración de serie.
- Sólo están marcadas en su base con el año de fabricación y muesca del fabricante.
Esto hace casi imposible su trazabilidad, máxime porque puedieron ser adquiridas en el mercado negro o en el mercado del coleccionismo.
La Policía no ha confirmado si se trata de munición inerte o no, lo que apuntaría más aún a la hipótesis de que en realidad se trata de material de colección inofensivo.
Pero además veamos este video en el que un letrado expone las conclusiones de su investigación particular al respecto: