Ana Obregón dice que a Irene Montero «las neuronas le van despacio con tanto lío», esto es porque la ministra de Igualdad anima a «tomar las calles» por el Día Internacional de la MujerBC y el resto de los medios y redes.
Igualdad y la Comisión del 8-M quieren volver a «tomar las calles» pese al coronavirus
Lógico que Ana Obregón no haya podido evitar discrepar al conocer que Irene Montero, ministra de Igualdad, que se dice pronto, animaba a «tomar las calles» el Día Internacional de la Mujer, 8 de marzo, considerándolo, como todo el que no es de Podemos en este País que manifestarse en esta fecha con el coronavirus al acecho no es muy recomendable. Es lo que opina básicamente la actriz, que no entiende, -los demás tampoco- la actuación del Ministerio de Igualdad.
Decía Ana Obregón en su cuenta de Instagram a Irene Montero.:
- «Desde el respeto voy a refrescarle la memoria porque a veces las conexiones sinápticas de las neuronas con tanto lío nos van despacio».
- La acusa, nada descabelladamente, de empeñarse en celebrar manifestaciones para «que empiece la cuarta ola antes de acabar la tercera, para que se contagien y mueran mujeres de todas las edades, para que los trabajadores se sigan arruinando».
- Le recuerda igualmente que si, el pasado año de 2020, no se hubieran producido las manifestaciones del 8M, «se hubieran evitado 20.000 muertes».
- Pide a Montero que no añada «más tumbas a la mala gestión del Gobierno».
- Y perfila que: «No asistir no significa que no seamos feministas, significa que queremos evitar más muertes. Y eso enaltece a la mujer. Este es mi humilde consejo, Irene».
- Ana Obregón le dice: «De una madre a otra madre, de una madre soltera que ha cuidado, educado y trabajado sin tener que utilizar (como dicen que has hecho tú) a una niñera pagada con dinero público, una madre que no ha tenido a Pablo para que le compre un chalé y tener un ministerio (qué suerte), una madre que ha cogido de la mano a su hijo luchando contra el cáncer y no la ha soltado hasta el último momento».
Los consejos de Obregón son sabios, recomienda a sus seguidores de Instagram que no se dejen engañar: «Elevad las palabras, no la voz. Es la lluvia la que hace crecer las flores no los truenos».
Ana Obregón y la ministra de Igualdad, Irene Montero
A pesar de los pesares, la manifestación del 8M por el Día de la Mujer podrá celebrarse en Madrid con un límite de 500 personas.
Ana Obregón no se ha mordido la lengua nunca al referirse a temas de actualidad o a problemas sociales o que afectan a la sociedad. En esta ocasión el tema es las manifestaciones aprobadas para celebrar la Jornada del Día de la Mujer y debido a ello su mensaje ha sido duro, según unos y claro según la mayoría. No se puede politiquear cuando están en juego las vidas de los demás.
La actual situación de pandemia por coronavirus no permite la celebración de ese tipo de reuniones en las que se prevee gran aglomeración de personas. Por celebrarlas el pasado año de 2020 los casos se dispararon y a los protagonistas del evento se deben miles y miles de muertes, así que no caiganos dos veces en la misma piedra.
Ana Obregón lo que recrimina a la política al frente del Ministeriod e igualdad es el hecho de haber convocado manifestaciones para celebrar la Jornada del Día de la Mujer en el actual contexto de pandemia actual en el que vivimos. Decía así:
"Todos queremos que esta pandemia acabe, pero nuestra ministra se empeña en celebrar esas manifestaciones para que empiece la cuarta ola antes de acabar la tercera, para que se contagien y mueran mujeres de todas las edades, para que los trabajadores se sigan arruinando".
Por eso el mensaje que le manda a Montero será duro pero fundamentalmente es claro, para que se entienda bien: "Por favor, no añadas más tumbas a la mala gestión del gobierno. Menos mal que la Ministra de Sanidad ha dicho que no va asistir".
O sea, la ministra convoca una manifestación y después no pretende ir, será por algo..., no...
No es el caso de quienes no van a ir a la manifestación pero se declaran radicalmente en contra de su convocatoria, en esto encaja perfectamente la frase de Obregón cuando dice que: "No asistir (a las manifestaciones) no significa que no seamos feministas, significa que queremos evitar mas muertes. Y eso enaltece a la mujer. Este es mi humilde consejo, Irene".
Por su parte, la ministra quiso dejar claro que "este 8M será diferente", asegurando que se respetarán "escrupulosamente lo que digan las autoridades sanitarias". Pero ella ya ha dicho que no piensa asistir... Montero insistió en que "no vamos a tolerar el discurso de criminalización de la derecha contra la lucha de las mujeres". Algo que nadie hace, todos excepto los islamistas, están a favor de la igualdad entre sexos, pero esa es la frase victimista y acusadora podemita que pretende sembar una sombra en los ánimos de quienes se oponen a tanta parafernacia ochomarcista. No hace falta tanto palabrería, las cosas se ahcen y punto, Montero está en una posición más que privilegiada para abordar, eso sí, con cordura el tema de la discriminación de la mujer, pero hay muchas discriminaciones que sufren las mujeres, hay que ir concretando y salvando obstáculos.