El monopolio de los salones de estética y consultas de cirugía plástica ya no es de las mujeres, sino que éstas lo comparte desde hace ya algún tiempo con los hombres, también preocupados en mejorar su aspecto y apariencia, con lo que a la vista de todos tendrán un aire más saludable y ellos se sentirán también mejor al mejorar su estética. El mercado laboral lo demanda y exige, se es lo que se parece y la primera impresión es decisiva. Hay un culto a la juventud y en una primera impresión, cada vez más, se tienden a evitar el envejecimiento natural, la flacidez, las canas o la caída de cabello, las manchas en la piel por la edad están demás y todo proceso natural que denote madurez o envejecimiento directamente es rechazado, ilógicamente pero ciertamente. Hay que eliminar la flacidez en el cuello, el doble mentón o problemas estéticos en la nariz. Todo lo cual requiere, dependiendo de la edad, diferentes consultas. Las consultas en relación con la mejoría de l